Las cinco problemáticas principales que nos podemos encontrar al automatizar pruebas


No
es la primera, ni la segunda vez que me pasa en un proyecto. Es
escuchar "automatización" y aparece un brillo especial en los ojos de
las personas responsables, tanto a nivel gestión como de la dirección.







Al principio de todo, la automatización se ve
como un juguete nuevo que emociona a todo el mundo y plantea la posibilidad de
que la carga de trabajo descienda
y ayude a garantizar la calidad de manera sencilla.
Después, poco a poco, la cosa suele ir enfriándose y las personas se van
enfocando en otras prioridades o proyectos nuevos.





A nivel empresarial, solo hay un camino posible
para que la automatización tenga éxito y todos los perfiles de gestión y
dirección la vean como un valor importante: marcarse objetivos reales.


Además, también deben de plantearse objetivos
como la actitud, aptitud y voluntad adecuada y correcta para que todas las
capas de negocio empujen en el mismo sentido
.





A lo largo de los años, he podido detectar una serie
de problemas que se suelen repetir en muchos proyectos o empresas y que hacen
que la automatización no llegue a buen puerto. En este caso, publicamos cinco ejemplos,
que os pueden ayudar a no cometerlos y detectarlos de manera temprana, si
sucediesen.




1. No se sabe que automatizar o por donde empezar.


La automatización no se trata de coger todos los
casos de prueba manuales que tengamos y automatizarlos como si no hubiese mañana
.
Lo primero que hay que hacer, es saber que se va a automatizar, que
funcionalidades deben de ser las primeras y que es lo más crítico.





El primer paso, que hay que tener claro, es
comenzar a automatizar lo que ya está estable y que no tenga cambios (o los menos
posibles)
, de esta manera, el ahorro de mantenimiento de las mismas será alto y
podemos dedicarnos a otras tareas.





Además, lo ideal es seguir automatizando tareas
repetitivas que puedan ahorrarnos aún más tiempo,
enfocándonos en la realización
de pruebas de humo o exploratorias.




2. Capacidad técnica del equipo


Otra problemática que nos podemos encontrar es el
perfil técnico del equipo. Realizar un proyecto de automatización importante,
necesita que se tenga cierta experiencia técnica
. Para ello, lo ideal es
capacitar a estas personas con formaciones, cursos e ir dejando tiempo para que
practiquen. Esto es algo complicado, ya que no se suele tener ni presupuesto, ni
tiempo para ello. 





Lo ideal, es el poder tener una persona experta en
automatización y que se le permita tener un porcentaje de su tiempo para formar
al resto del equipo con charlas y prácticas
que puedan hacer crecer a todas las
personas en ese sentido.




3. Falta de procesos adecuados para una automatización
correcta


Este es uno de los problemas más comunes, tanto
en automatización como en manual. No existen procesos, están mal definidos o son
ineficientes
. Otro punto, es que no se da una información integral del proceso,
así que cada persona lo interpreta a su manera y acaba siendo un caos integral.





Cuanto más simple sea el proceso, más eficiente
será y más sencillo
tendremos el poder mostrarlo y formar a las personas del
equipo.





Un buen proceso de automatización debe de seguir
una premisa muy importante, que es la de crear tareas independientes que vayan automatizándose
progresivamente
, como si fuesen historias de usuario. Esto hará que tengamos un
backlog completo que podemos priorizar y administrar adecuadamente.




4. Marcarse objetivos adecuados


Lo primero que se suele hacer, en papel, es el de
montar un marco de automatización adecuado, integrado con el ciclo de integración
continua
, que sea realmente mantenible y se ejecute constantemente y de manera
estable.





Esto, cuando lo pintamos, suele funcionar estupendamente.
Ahora bien, para llegar a llevarlo a cabo, es necesario un nivel de madurez que
no se suele encontrar rápidamente.





Cuando comenzamos un proyecto de automatización,
tenemos que hacer algo sencillo, con una inversión, un tiempo y un coste
moderados
que permita ser todo lo sostenible que se debe de ser.





Debemos de identificar varias funcionalidades
estables y automatizarlas
, tal y como hemos comentado anteriormente. Una vez
que tengamos eso, hay que hacer una ligera retrospectiva que nos de información
de lo que ha ido mal y lo que ha salido bien
, esto nos ayudará a que todo el
resto de pruebas que vayamos automatizando no vengan implícitas con los mismos
errores y podamos poner en práctica las cosas buenas que hemos realizado para
ser eficiente y rápido.





5. Dificultad en verificar funcionalidades de manera
automática


A menudo, nos encontramos con aplicaciones
complejas y que no son fácilmente automatizables, ya sea por su arquitectura o
por componentes que no se capturan adecuadamente por las herramientas de
pruebas
.





Para ello, debemos de crear un hilo conductor
entre el equipo de desarrollo y las personas que automatizarán la plataforma
para acordar que los nuevos desarrollos puedan realizarse de una manera más cómoda

para poder realizar este tipo de pruebas o incluso, que las personas de
desarrollo, puedan ayudar a encontrar una manera de automatizar los componentes
que han construido ellos mismos.


También, debemos de hacer un estudio entre
diferentes herramientas de automatización y comprobar cual es la que mejor
encaja en nuestras necesidades y que sea la más sencilla de cara a invertir el
menor tiempo y esfuerzo para llevar a cabo este tipo de tareas.







Estos cinco ejemplos de posibles problemas que
podemos encontrarnos a la hora de automatizar, pueden llegar a ser solventados
con las pautas que comentamos, pero, sobre todo, lo más importante, es usar el
sentido común, no elevar las expectativas demasiado alto y, sobre todo, hacer
las cosas paso a paso y con calma, meditando cada acción y no llevando al límite
al equipo
en relación al tiempo y al esfuerzo, pudiéndolos quemar si necesidad.
Apostemos por una automatización sostenible y progresiva en nuestros proyectos.

0 Comentarios